Como pasa el tiempo y los almanaques
son los que me dicen cuanto queda de viaje
en este camino todo el equipaje
se me fue perdiendo entre los parajes
Es un sol de otoño el que aquí se nota
va de punta en punta pero no me toca
sin embargo insiste y en la periferia
unos ojos tristes son los que me espera
Entre sombras tristes y los huracanes
luego de la calma son fantasmas errantes
y en un eco firme que de apoco asoma
es la noche oscura la que me arropa
y este ultimo verso será enarbolado
como un tibio beso sin ser recordado