El rey
El espíritu es el humo que hechiza su moda, a nadie mas. Y como quien dice el rey de la batuta, como un deber, buscará baldosas céntricas para hacer valer su soberanía. Un rajá excelso de imagen pero carente de sentido. Los cortesanos lo reconocerán pero lo tratarán de lejos, porque allá arriba también hay gente que piensa.